La búsqueda del propósito del Alma
Nuestro camino de búsqueda espiritual se acerca a una búsqueda mágica. Se trata de un viaje sagrado en el cual se recuperan nuestros recuerdos de quién en verdad somos.
La búsqueda del propósito del alma no se refiere a encontrar una vocación o trabajo para llevar a cabo. Porque abarca el sentido, la esencia del recordar a qué hemos venido, y qué dones traemos para ponerlos al servicio del mundo. Entonces, es mucho más amplio y comprende al ser inefable, nuestra alma.
Se dice que hubo un tiempo, anterior al 1500 a.c. en el que todos los humanos eran iniciados y alineados con sus poderes internos, y esto los capacitaba para desarrollar toda su creatividad, todo su potencial.
¿Te imaginas poder liberar el potencial creativo que se encuentra en tu interior?
La energía quironiana.
En ese entonces algunos eran iniciados como guerreros sagrados, bailarines sagrados, doncellas para el matrimonio sagrado, reyes sagrados. Cada persona podía hacerse consciente de su fuerza sagrada – lo que podríamos llamar la energía quironiana – que nos da la vida. De esta forma, poner esa fuerza sagrada al servicio de la comunidad.
La energía quironiana proviene del don que Quirón, el planeta dador de lo que yo llamo la fuerza quironiana. Fuerza que se revela en esa búsqueda espiritual a la que nos dirigen las heridas de la vida.
Reconocer ese dolor que produce un sentido de carencia, una especie de estigma que muchas veces ocultamos, y se perfila en algún área de tu vida. Precisamente en el área de la casa astrológica donde se encuentra emplazado tu Quirón Natal.
Descubriendo el Don
Cuando podemos descubrir, a través de interpretar nuestra Carta Natal, aquellos talentos y dones que Quirón nos provee, encontramos el sentido de nuestro inmenso poder de resiliencia.
Por esta razón podemos ser más conscientes de nuestro Ser. Así lograr apoderarnos de la fuerza sagrada que le da sentido a nuestra vida. Es decir, la conexión entre alma y personalidad, poniendo la personalidad al servicio del Alma.
Los Nodos Lunares, la motivación del Alma
Además del Don de Quirón, los Nodos Lunares también forman parte del camino de conexión con el Propósito del Alma.
El Nodo Sur revela el sendero que ya trae aprendido el Alma, mientras que el Nodo Norte sirve de faro hacia el cual dirigir nuestra atención y disponernos a crear en esta experiencia de vida.
Entonces, cuánto más nos dirigimos hacia el camino que nos marca el Nodo Norte, más nos acercamos a nuestra Misión de Vida o Propósito del Alma.
De todas formas, hay más factores en el Mapa Natal individual que nos acercan a develar el camino del Alma.
Las fuerzas evolutivas en el mandala astrológico
Por supuesto, en el mandala astrológico, hay fuerzas que nutren cierta inercia hacia el pasado. Por ejemplo, la Luna Natal es nuestra lupa emocional, a través de la cual sentimos y reaccionamos a nuestro entorno. Nacemos con una impronta lunar que se fortalece desde la primera respiración.
La Luna Natal es la relación con la madre, con el vínculo maternal o su ausencia, la que nos marcará en nuestra forma de recibir y dar amor. Aprender sobre nuestra Luna Natal y observar cómo somos afectivamente de acuerdo a nuestra Luna es clave para nuestro bienestar.
Marte, en el mapa natal, nos muestra el impulso que nos motiva. Como así también pone de manifiesto cómo liberas tu ira. Liberar la ira es parte del camino de sanación y auto descubrimiento.
Por último, Plutón es el gran impulsor de la evolución del alma, a través de las grandes transformaciones que experimentamos a lo largo de la vida. Se trata de aprender a decodificar su mensaje.
Decodificar el propósito del Alma
Al fin y al cabo, se trata de decodificarnos. Esa palabra tan de moda hoy día. La Astrología, como una herramienta de decodificación del Propósito de Alma nos permite develar esa gran incógnita, a fin de poner de manifiesto aquellos dones y talentos únicos que poseemos. Esa es mi propuesta desde la Astrologia Transformativa.
Mi experiencia personal
En mi experiencia personal la Astrología me ha dado la oportunidad de conocerme tanto a mí, como a quienes me rodean. He podido comprender que mi alma trae un propósito, que las falencias y dificultades son motores que me motivan a superarme, utilizando mis dones. Entender cuáles son mis talentos y cómo activar lo que traje para dar. Me ha permitido unir las pistas que me acercan para recordar cada día más, quien soy.
¡Bendiciones de Navidad!
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