Tomar té, una costumbre que todos traemos de las abuelas…
una taza de té para el resfrío o sentirse mejor…
Puede considerar que esos saquitos de té que tiene en su cocina son el remedio supremo. En particular, el té verde, que tiene tantos efectos positivos comprobamos científicamente. Si bien la palabra té se refiere a toda infusión que se prepara con agua caliente y hierbas, el té verdadero se prepara con hojas de Camellia Sinesis, un arbusto perenne. Las diferencias en el modo de procesar las hojas determinan la variedad de té negro, verde, blanco y oolong. Al tomar té verde se disminuye el riesgo de muerte por infarto o ataque cerebral y reduce los riesgos de enfermedad cardíaca, cáncer e incluso caries dentales. No nos olvidemos del té negro o del oolong que poseen gran cantidad de antioxidantes.
Raíces históricas…
Se viene preparando te desde hace medio millón de años. Los chinos estuvieron entre los primeros en cultivar la planta del te, considerada medicinal ya en el 1046 A.C. El te era a la vez un tributo imperial y una bebida que se vendía en la calle.
Un sacerdote budista les hizo conocer a los japoneses un polvo de te llamado Matcha, que él había descubierto en China. La costumbre de tomar se te expandió como un reguero de pólvora por todo el Japón del siglo XII, y paso a ser parte fundamental de la cultura japonesa. Los occidentales se tardaron cientos de años en descubrir el té, pero cuando lo llevaron a sus países al volver de los primeros viajes a Japón, hacia 1610, la infusión no despertó mucho interés, salvo por parte de Holanda.
Con el tiempo, los holandeses introdujeron el té en América, para deleite de los colonos americanos. Él se te convirtió en un producto de consumo tan importante en la época colonial, que los británicos decidieron grabarlo con impuestos para su control, práctica que inspiró un histórico acto de resistencia. Motin del té de Boston.
¿Que contiene?
El té contiene compuestos llamados catequinas. Según el instituto nacional del cáncer, estas sustancias químicas de las plantas, tan saludables, son poderosos antioxidantes con efectos antivirales y, potencialmente, anti cáncer. Una de las catequinas del té, llamada EGCG, es cien veces más poderosa que la vitamina C, y protege al ADN celular de las modificaciones que podrían derivar en cáncer. Aunque la concentración más elevada de catequinas se encuentra en el té verde, el té negro también es una fuente adecuada. Las variantes de té con nombres comerciales son mezclas de hasta veinte variedades diferentes de hojas, combinadas de manera de asegurar un sabor constante.
Lecciones básicas de te
Todo tipo de té que no sea de hierbas proviene de la misma planta. ¿Entonces, como se explican las diferentes variedades de te? Por su procesamiento.
Para elaborar té negro las hojas se secan y se procesan para liberar las enzimas, que en pocas horas reaccionan con la catequina y producen cambios en el color y en el sabor. Este proceso se suele denominar fermentación.
El té verde no está fermentado, las hojas se tratan con vapor para detener la actividad de las enzimas.
El té oolong es parcialmente fermentado.
Es bueno saber…
Probablemente, dos o tres tazas de té por día son suficientes para brindar la mayor parte de sus beneficios. Una precaución: si suele tomar el té con leche podría estar perdiéndose parte de su protección para la salud. Las proteínas de la leche pueden interactuar con los polifenoles del té y bloquear sus efectos benéficos.
Como comprar un buen te…
Para conseguir te bien fresco compre en una tienda que tenga buena rotación de mercadería y lleve solo que necesitara para un mes. El té se conserva mejor en una alacena fresca y seca, refrigerarlo o congelarlo puede estropear su sabor. El té verde contiene menos cafeína que el te negro, pero por lo demás, su perfil químico es similar.
Tés de hierbas…
Estas infusiones se preparan con hojas secas de plantas florales y herbáceas. A pesar de que su perfil químico es totalmente diferente del té negro o verde, aun asi ofrecen beneficios para la salud.
Te contamos sobre algunos tés de hierbas para que hagas uso de sus excelentes propiedades.
Lavanda: se prepara con flores de lavanda disecadas y pueden tener efecto tranquilizante.
Melisa: te herbal con toques de menta y limón que ayuda a calmar los nervios alterados.
Ortiga: se prepara con la misma planta que causa ardor e irritación en la piel. Es rico en vitamina C y varios minerales. Se recomienda para tratar artritis, rinitis alérgica y gota, y para fomentar la producción de leche en las madres lactantes. Se debe evitar durante el embarazo, porque podría provocar contracciones uterinas.
Menta inglesa: este te es refrescante, en especial con hielo. Estimula la digestión y disipa los gases.
Evítelo si sufre de hernia de hiato, ya que la menta promueve el reflujo gástrico del contenido del estómago hacia el esófago.
Romero: el té preparado con esta conocida hierba de jardín favorece la memoria y el estado de alerta, pero beber más de dos o tres tazas diarias, puede irritar el estómago.
Salvia: una taza de té de salvia antes de dormir previene el sudor asociado a la menopausia.
Tomillo: se recomienda el té de tomillo para las molestias gastrointestinales, y en especial para tratar la congestión pulmonar y la tos.
Es bueno saber que dentro de la alacena de nuestra cocina tenemos un remedio muy eficaz y con múltiples usos nutricionales y medicinales, el nombrado anteriormente te negro.
Dentro de sus usos, encontramos que sirve para:
- Acné y forúnculos
- Artritis
- Conjuntivitis
- Cortes
- Diarrea
- Dolor de muela
- Estrés y fatiga
- Hemorroides
- Herpes simple
- Mal olor en los pies
- Memoria
- Picadura de insectos
- Protección contra el cáncer
- Prurito anal
- Quemaduras de sol
- Resfrio y gripe
- Salud cardiaca
- Tos
- Ulcera
- Urticaria por plantas venenosas
- Varicela
¿Cuál es la mejor hora para tomar té negro?
El té negro está indicado especialmente para las primeras horas del día. Es ideal como desayuno y sustitutivo del café puesto que su efecto estimulante, aunque contiene menos cafeína que éste, permanece durante más tiempo en nuestro cuerpo.
Por eso no es recomendable en casos de ansiedad o antes de ir a dormir. En este caso puede optar por un té de hierbas.
¿Qué pasa si tomo té negro en la noche?
Tanto el té negro como el té verde no son nada recomendables por la noche en casos de ansiedad o antes de ir a dormir. Puede generar insomnio.
Esto se debe a la cantidad de teína presente en ellos. Esto hace que nos cueste un poco dormir. Existen infusiones que consiguen relajar nuestro organismo a la hora de dormir. En este caso puede optar por un té de hierbas, lavanda o melisa es una buena opción.
Mas Beneficios…
El proceso de oxidación consigue que el té negro contenga más cafeína que sus variantes (entre 2 y 4%). Además, esta infusión es rica en antioxidantes, como los polifenoles y catequinas, y en dos compuestos saludables: teaflavinas y tearubiginas. Consumiéndolo regularmente, puedes obtener ciertos beneficios:
Puede fortalecer los huesos
Algunos investigadores señalan que tomar té negro ayudaría a desarrollar una mayor densidad ósea, especialmente en mujeres de 65 años o más. Tomar esta infusión también parece estar asociado con un menor riesgo de fracturas de cadera. Los especialistas creen que estos beneficios se deben a los flavonoides y fitoquímicos que se encuentran en esta bebida.
Antioxidante y humectante para la piel
Algunos estudios vincularon sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes con una mejor salud cutánea. Los enjuagues de té negro pueden aplicarse sobre el rostro y mejorar la humedad y brillo de la piel. También funcionaría como un remedio efectivo contra la piel seca y las manchas de la edad. Incluso existe evidencia que vincula su consumo con un menor riesgo de cáncer de piel.
Favorece el desarrollo de bacterias buenas
Tanto el té negro como el verde tendrían un impacto significativo sobre la microbiota intestinal, promoviendo el desarrollo de las bacterias «buenas». Estas mejoran el funcionamiento del intestino, al estimular la producción de energía y vitaminas, y la absorción de nutrientes.
Contra la ateroesclerosis
Las personas que beben más de tres tazas de té (ya sea té negro o verde) por día llegan a tener un 21% menos de riesgo de accidente cerebrovascular, en comparación con las personas que beben menos de una taza de té por día. Gracias a su rico contenido en flavonoles, teaflavinas y ácido gálico, ayudaría a combatir el endurecimiento de las arterias o ateroesclerosis.
Prof. De yoga y stretching.
Instructora de Meditación.
