Dentro de ti

Busca dentro de ti. No es un proceso intelectual o racional, se trata de encontrar tu fuerza.

En la cultural Oriental, la idea es que, dentro de nosotros, habita todo lo que necesitamos. Esta fuerza crece de los propósitos que nos impulsan. Nace de intentar ser siempre mejores, con nosotros mismos y con los demás. Aprender a olvidar. Practicar el perdón. El rencor y la ira son dos fuerzas muy poderosas que nos bloquean totalmente. Siendo un obstáculo para nuestro crecimiento interior.

Dejar ir las vivencias negativas aprendiendo de ellas, y mantener en la memoria las vivencias positivas.

Practicar el bien. No es una creencia ni una religión. La bondad es lo importante, y no las creencias, que se quieren apropiar de esta palabra. Esta bondad debe extenderse a todo, desde seres vivos a inertes.

Adquirir el hábito de estar contento, es una decisión personal. No el resultado de una circunstancia particular. Este estado de gozo no proviene de un factor externo. Nace de nuestro interior, y persiste, independientemente de las circunstancias. La felicidad es un hábito. La meditación es la herramienta que convierte ese sentimiento pasajero, en una costumbre que se mantiene incluso, en los momentos difíciles.

Propósito de no juzgar a nadie. Siempre buscar la compresión y la compasión. Todo juicio sobre los demás, es en buena medida injusto. (Aunque pensemos que sus malas acciones son censurables). Difícilmente, alguien que no sea la propia persona, es capaz de identificar todas las motivaciones de un comportamiento.

Nadie tiene por qué cumplir con nuestras expectativas.

A menudo juzgamos sin darnos cuenta.

Buscar la armonía, la ley suprema de universo. Todo lo existente, guarda una relación de armonía entre sí. Buscar la armonía entre cuerpo, mente y energía, es la base de la salud física y mental.

El mundo actual, está desorientado, materializado y atormentado.

La humildad de cada persona es como una luz en el mundo actual.

Aliviando los tormentos interiores de las personas.

Buscar la humildad en tus palabras y tus actos. Esta virtud, ayuda a sanar al que la práctica.

Cuidar de las personas que te rodean.

Estas recomendaciones no son reglas. Son pautas que pueden ayudarte a construir una vida más productiva, para ti y para el mundo. Nos pueden reportar satisfacciones, muy importante.

Vanessa Martín Ardanaz