¿Cómo hacerte responsable de tu felicidad en tu ambiente de trabajo?
Mal de muchos, consuelo de tontos, decimos en mi tierra. Pero, lo cierto es que muchas personas no encuentran la felicidad en su lugar de trabajo. Normalizar la infelicidad no pareciera la mejor alternativa. ¿Cómo combatirla?
Acá te dejo algunos tips para encontrar la felicidad en el trabajo, basados justamente en las principales razones por las cuales las personas no la encuentran.
- ¡Trabajo demasiado!
- ¡Mi jefe es insoportable!
- ¡No veo para mí ninguna proyección!
- ¡Me pagan mal!
- ¡No me gusta lo que hago!
- ¡Estoy pasando por un mal momento en mi esfera personal!
- ¡No me gusta el ambiente!
- Entre otras
¿Sabes algo? Todas estas situaciones tienen solución. No obstante, es indispensable hacer un cambio de paradigma para encontrar alguna.
Pasar de la víctima a la persona responsable
Ten en cuenta:
- Nadie más responsable que nosotros mismos de nuestra felicidad. Así como no podemos cargarle a nuestra pareja la responsabilidad de hacernos felices, tampoco podemos cargarle a nuestro empleador la responsabilidad de nuestra felicidad en el trabajo. Nuestra satisfacción personal reside en nosotros mismos, nos corresponde a nosotros procurárnosla, en vez de quejarnos.
- De igual manera, por ingentes esfuerzos que haga un empleador, que hay muchos enfocados en procurar el bienestar de sus colaboradores y velar por su felicidad en el trabajo, tú eres responsable de cuidar de tu propio bienestar y tus intereses personales. Las empresas cuidarán de tu bienestar hasta donde ese bienestar no entre en conflicto con sus objetivos productivos y de negocio.
- Así mismo, es mejor andar por la vida sintiéndote dueño de tu destino y autor de tu historia, que un eterno damnificado de las circunstancias.
- E indiscutiblemente, la semilla de la felicidad es la gratitud. Así que agradece tener trabajo y luego ocúpate de mejorar tu experiencia.
Dicho esto, voy a empezar a revisar en detalle algunos de esos motivos comunes por los cuales las personas no encuentran la felicidad en el trabajo.
Motivos de infelicidad y posibles maneras para combatirla
Trabajo demasiado: si, es un hecho que vivimos en una sociedad donde prima el hacer sobre el ser, pareciera que el valor de las personas se centra más en lo que hacen o pueden hacer, que en la persona que son. Pero, si trabajas mucho vale la pena que examines varios aspectos.
- ¿Sabes poner límites?
- ¿Sabes decir no como respuesta?
- ¿Eres realmente eficiente con el uso de tu tiempo?
- ¿Sabes trabajar en equipo?
- ¿Sabes delegar, empoderar al personal a tu cargo?
Mi jefe es insoportable: claro hay jefes de jefes, algunos con más inteligencia emocional, asertividad y empatía que otros. Algunos más claros o menos precisos al momento de dar instrucciones. Algunos excelentes maestros, otros maestros en botarte al agua sin muchas herramientas. Pero, hablemos con honestidad ¿Quién en esta vida es perfecto? Nadie. Ni tú, ni yo, ni nuestros seres queridos. Te has preguntado:
- ¿Qué es lo que tanto te molesta de la manera de ser de tu jefe?
- ¿Por qué ese comportamiento genera particular malestar en ti?
- ¿Qué hay de tí reflejado en ese jefe, que haga que salgan chispas en determinados momentos?
No veo para mí ninguna proyección: es muy legítimo querer crecer, ganar mejor y tener oportunidades de aprendizaje. Lo grave sería que estuvieras de poca lucha, sin querer evolucionar de alguna manera. Pero, frente a este punto:
- ¿Ya pediste pista? Así decimos en Colombia, cuando uno expresa que está listo para más y mejores responsabilidades.
- ¿Has hecho méritos para un ascenso, para dar un salto? Todos sabemos si hemos hecho la tarea o no, nada más clave que una buena autoevaluación.
- Consideras que has hecho méritos y tu jefe no ¿Has hecho tus observaciones respetuosas con respecto a las métricas o criterios de evaluación?
- ¿Tienes claro cuál sería la posición idónea o el paso siguiente en cargo para tí? De no existir, ¿Te atreverías a formular un rol que realmente le genere valor al negocio y que tú puedas desempeñar óptimamente?
Me pagan mal: ganar bien o mal es un aspecto que debe someterse a prueba, en el sentido que debe trascender tu mirada subjetiva.
- ¿Cuánto le pagan a alguien de tu posición en la industria en la que te desempeñas?
- ¿Estás dispuesto a salirte de tu zona cómoda y proponer un pago variable por resultados de tu gestión?
- El salario es una consecuencia de tu rol y contribución al negocio, o al menos eso dicta la lógica ¿Ya exploraste todos los puntos de la viñeta anterior, alusiva al componente de proyección?
No me gusta lo que hago: todos los trabajos sin excepción tienen cosas chéveres y no tan chéveres. Por supuesto, lo chévere o no depende de tus gustos personales, intereses y aspiraciones.
- ¿Qué porcentaje de tu trabajo, del total de actividades a tu cargo no te gusta?
- ¿El porcentaje, visto en perspectiva, entra en tu zona de tolerancia o no?
- ¿Has buscado alternativas para ser más eficiente en esas labores que no te gustan, delegarlas o suprimirlas?
Estoy pasando por un mal momento en mi esfera personal: todos pasamos por etapas personales difíciles, duelos, perdidas, separaciones, asuntos de salud, en fin. Y nada más hipócrita y absurdo que decirles a las personas que no traigan sus problemas al trabajo, porque nuestras emociones nos acompañan a todas partes. Hasta el momento no han inventado un botón on/off de emociones personales. Pero, en esos momentos la prioridad eres tú.
- ¿Te estás ocupando de ti mismo, de tu bienestar en esta etapa?
- Tú no eres un hacer humano, eres un ser humano ¿Tienes un plan para atenderte en esta situación?
- ¿Ya buscaste ayuda? La que creas que puede apoyarte
- ¿Será momento de pedir unos días de descanso?
No me gusta el ambiente: Decía Gandhi: “Se el cambio qué quieres ver en el mundo”. Nada más irresistible que un gesto de cariño y amabilidad. Toma tú la iniciativa. Qué tu jefe no se preocupa por las personas a su cargo, ¿Le has preguntado sobre su familia y sus seres queridos? Que todos son competitivos y “están echando codo”, ¿te has mostrado colaborador y diligente, en disposición de jugar un juego ganar – ganar? Qué no tienes amigos ¿No has pensado que algo falla en ti?
La tarea que te corresponde
Dime ¿Te has hecho todas estas preguntas? ¿Has intentado darles respuesta? Si lo has hecho, vas por buen camino, estás en el sendero de la solución. Si no lo has hecho, ¡ocúpate!
Y, por último, si ya sientes que agotaste todas estas posibilidades y la insatisfacción persiste, tranquilo, indiscutiblemente es el momento de un cambio. Recorrer este camino que acabo de compartirte iluminará justamente tus pasos a seguir y permitirá que te llevas los aprendizajes de esta experiencia.
El cambio que a lo mejor requieres generar depende igualmente de ti, de tu compromiso para buscar un nuevo empleo que realmente te motive, capacitarte para desempeñarte mejor o elegir el camino del emprendimiento. Todos posibles vehículos para reencontrarte con el disfrute y la felicidad en el trabajo.
Busca ayuda, estaría encantada de apoyarte a reconectar con tu propósito personal y repensar tu marca personal. Visita mi página web: www.catalinavega.co
En conclusión: ¡Menos queja y más acción! ¡Cree en tu poder personal y úsalo! Cuando hay intención clara, lo que viene es logístico y de seguro puede resolverse.
0 comentarios