La planificación financiera debe incluir ahorros para la jubilación, y seleccionar el vehículo de inversión correcto es crucial para un futuro financiero estable. La IRA tradicional y la IRA Roth son dos de las opciones más populares. Ambas cuentas tienen cualidades, ventajas y desventajas distintivas, y es crucial comprender como se diferencian entre sí para tomar una decisión acertada.
IRA tradicional:
Una IRA tradicional es un vehículo de inversión con impuestos diferidos que permite a las personas hacer contribuciones antes de impuestos. Como resultado, las contribuciones de una IRA tradicional son deducibles de impuestos, lo que reduce el ingreso sujeto a impuestos y la carga fiscal anual del contribuyente. Cuando un inversionista comienza a realizar retiros de una IRA tradicional durante la jubilación, el dinero crece libre de impuestos hasta esa fecha, momento en el cual los retiros están sujetos al impuesto sobre el ingreso ordinario.
La reducción impositiva instantánea es una de las principales ventajas de la IRA Tradicional. Las contribuciones de una IRA tradicional son deducibles de los ingresos en el año en que se realizan, lo que puede reducir los ingresos imponibles del inversionista y reducir la cantidad de impuestos adeudados. Para las personas en tramos impositivos más altos que desean reducir su obligación tributaria actual, la IRA tradicional es una opción atractiva.
No hay restricciones sobre la elegibilidad de contribución en función de los ingresos, que es otro beneficio de una IRA tradicional. No importa cuánto dinero ganen, cualquier persona menor de 70,5 años puede contribuir a una IRA tradicional. Como resultado, un amplio espectro de personas ahora puede utilizar la IRA tradicional, que puede ser especialmente beneficiosa para aquellos que no tienen acceso a los planes de jubilación patrocinados por el empleador.
Sin embargo, una IRA tradicional también tiene importantes inconvenientes. El inversor debe empezar a sacar distribuciones de la cuenta a los 70,5 años, necesite o no el dinero, y este es uno de los principales aspectos negativos. Las distribuciones también están sujetas al impuesto sobre el ingreso ordinario, lo que podría aumentar su carga fiscal de jubilación.
Los límites de contribución para una IRA tradicional son otro inconveniente. El límite máximo de contribución de IRA tradicional para el año fiscal 2022 es de $6,000 para cualquier persona menor de 50 años y $7,000 para personas mayores de 50 años. Para las personas que desean ahorrar más para la jubilación y pueden necesitar buscar otras opciones de inversión, este límite de contribución puede ser una barrera importante.
IRA Roth:
Una cuenta de inversión después de impuestos que permite retiros libres de impuestos durante la jubilación se conoce como Roth IRA. El inversionista paga impuestos sobre las contribuciones realizadas a una cuenta IRA Roth en el año en que se realizan, pero no sobre los retiros realizados durante la jubilación.
La capacidad de una cuenta IRA Roth de darle al propietario más flexibilidad para la jubilación es una de sus principales ventajas. El inversionista puede elegir sacar tanto o tan poco dinero de su Roth IRA como necesite sin tener que preocuparse por cómo afectaría sus impuestos porque los retiros de una Roth IRA están libres de impuestos. Además, una IRA Roth no tiene distribuciones mínimas obligatorias, lo que permite al propietario mantener su dinero en la cuenta durante el tiempo que considere oportuno.
El hecho de que no haya un límite de edad superior para las contribuciones a una cuenta IRA Roth es otro beneficio. Las cuentas IRA Roth son una opción popular para las personas que desean continuar ahorrando para la jubilación a lo largo de sus años de trabajo porque el inversionista puede seguir haciendo contribuciones siempre que haya ganado dinero.
Sin embargo, una cuenta IRA Roth también tiene importantes inconvenientes. El hecho de que haya límites sobre quién puede contribuir a una cuenta IRA Roth es una de las principales desventajas. Las personas y parejas que ganen más de $125 000 y $198 000 respectivamente para el año fiscal 2022 no son elegibles para contribuir a una cuenta IRA Roth. Para aquellos que desean ahorrar para la jubilación pero no pueden hacerlo debido a su nivel de ingresos, esto puede ser una barrera importante.
El hecho de que las contribuciones a una cuenta IRA Roth se gravan en el año en que se realizan, lo que puede generar una mayor carga fiscal inmediata, es otro inconveniente. Para las personas que tienen una tasa impositiva alta y desean reducir su obligación fiscal actual, esta podría no ser la mejor opción.
En conclusión, las circunstancias financieras únicas, las aspiraciones financieras y los planes de jubilación de una persona determinan en última instancia si elige una IRA tradicional o una IRA Roth. Una IRA tradicional podría ser una mejor opción para las personas en tramos impositivos altos que desean reducir su obligación tributaria actual. Sin embargo, una cuenta IRA Roth podría ser una mejor opción para las personas que quieren más libertad en la jubilación y no les importa pagar impuestos sobre sus contribuciones ahora.
Para decidir qué opción de inversión es mejor para usted, es crucial hablar con un asesor financiero o un experto en impuestos. Además, es fundamental tener en cuenta que la diversificación de su cartera de jubilación podría ofrecerle un futuro financiero más estable y que los ahorros para la jubilación no deben limitarse a un solo tipo de inversión. Además, hacer contribuciones a un 401(k) u otro plan de jubilación patrocinado por el empleador puede ayudarlo a aumentar sus ahorros para la jubilación y ofrecerle ventajas impositivas adicionales.