La rueda del ratón

Si eres de esas personas que pone la atención en la mitad del vaso vacío, este artículo es para vos. ¡Sí! Porque acá vamos a reflexionar juntos acerca de si esta actitud frente a la vida te está abriendo o cerrando posibilidades. Solemos poner la atención es lo que nos falta o en lo que «nos sale mal», y es un pensamiento que se vuelve recurrente. Hay varios factores que influyen para que esto sea así, y acá vamos a ver algunos:

• Pereza: no es fácil admitirlo, sin embargo, uno de los factores que impiden que estés teniendo resultados efectivos es por la pereza que le gana la pulseada a la acción.
• Procrastinación: «lo dejo para después», «comienzo el lunes», son frases con las que solemos mentirnos y finalmente, termina por no suceder aquello que procrastinamos. Es una manera de autoboicotearte a ti mismo/a.
• Falta de autoconfianza: puede pasarte que te esté faltando una dosis de confianza en vos mismo/a. Si no comienzas por creer en ti, ¿cómo esperas que lo hagan los demás? cadeEsto va ligado a la falta de merecimiento, el hecho de creer que no mereces que te pase «algo bueno». Ambas están relacionadas a nuestras heridas de la infancia, así es que, es importante reconocerlas para sanarlas.
• Miedo: nuestro enemigo interno. No hay peor enemigo que aquél que está en nuestro interior y encima lo alimentamos. En ocasiones, el miedo puede darte las fuerzas que necesitas, pero si es un miedo paralizante es mejor salir de ahí. ¿Qué es lo peor que podría pasar? A veces es mejor decir, ¡¡¡Con miedo y todo, allá voy!!!

Aún hay más…

• Negatividad: los pensamientos negativos son la rueda del ratón en sí mismos. Subirse a esa rueda, sólo hará que circules siempre sobre las mismas ideas imposibilitantes. Pensar en «me irá mal», «nunca tengo suerte», «seguro me dirán que no», etc. te lleva a un pesimismo del cual será difícil salir. Echa por tierra esas creencias y pensamientos limitantes, y conviértelos en pensamientos potenciadores.
• Sobre-analizar: si por cada decisión que tienes que tomar, te detienes a hacer un exhaustivo análisis de costos y beneficios, y te detienes más en los «contras» que en los «pros», nunca darás el paso siguiente. Claro, hay situaciones que lo requieren, pero hay otras en que la intuición será tu guía y tu mejor aliada.
• Echar culpas a otros: otro de los factores tiene que ver con no hacerte responsable de tus acciones y decisiones. Si siempre estás buscando excusas y a quién o a qué culpar, será difícil salir de esa rueda. Hazte responsable y piensa ¿Qué depende de ti en esta situación? Y si necesitas de terceros ¿Qué pedidos debo realizar? ¿Qué conversaciones son necesarias para lograrlo?

Cómo salir de la «rueda del ratón»

Algunas ideas que pueden ayudarte a salir de esta «rueda del ratón» son:

• Autoconocimiento: Reconocer que estás teniendo pensamientos negativos es el primer paso. Hacer algo con ello, lo segundo. Si puedes darte cuenta de que eso no te está llevando a ningún lugar, trabaja en convertirlos en pensamientos que te abran posibilidades. Registra cómo es tu emocionalidad con unos y con otros. Toma consciencia de tu lenguaje corporal respecto a ellos. Y elige cuál te hace sentir mejor.
• Habla sobre el tema: puedes tomar sesiones de Coaching, por ejemplo. Hablar con alguien entrenado/a para este fin, siempre ayuda a ordenar las ideas y tomar mejores decisiones.
• Practica la meditación: tómate unos minutos al día para sólo escuchar tu respiración y apagar esos pensamientos. La mente también necesita descansar. Tu cuerpo te lo agradecerá.
• Cambia el enfoque de tus pensamientos: si hasta ahora venías poniendo la atención en lo que «No» era posible. Detente y ahora comienza a pensar en lo que «Sí» lo es. Dónde pongas tu energía, eso alimentarás.
• Busca soluciones creativas: piensa cómo puedes darle una solución con formas que aún no has puesto en práctica. Y busca ayuda, de ser necesario.

Libérate de la prisión

Los pensamientos negativos forman las paredes de tu propia cárcel, una cárcel que creas para ti mismo. Liberarte de tu prisión es tan simple como cambiar tu manera de pensar. Tan sencillo como decidir querer estar mejor. No sigas dándole poder a esos pensamientos negativos, toma las riendas de tu vida, que por supuesto, incluyen tu mente también.

Hay estudios científicos que dicen que al menos desarrollamos 60.000 pensamientos a diario y si la mayoría son repetitivos, negativos y que nos llevan hacia el pasado, estamos lejos de obtener un bienestar mental y físico. Muchos de los pensamientos repercuten también en nuestra salud, comienzan las dolencias por exceso de estrés, contracturas, etc.

Te invito a que medites sobre todo lo que te he compartido en este artículo, y si requieres una conversación para ordenarte, ya sabes cómo encontrarme. Para concluir, te regalo esta frase que compartí hoy en mis redes: «Cuánto más miedo tiene una persona, más usa su mente. Cuánto menos miedo tiene, más usa su corazón». Que el corazón sea tu guía, hoy y siempre.

Gracias totales!!!

Deby

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