Meditación y liberación
Cierra los ojos, relaja tu cuerpo, respira profundamente, inspira y expira, cuenta diez respiraciones.
Ingresa a tu zona de meditación para liberar todas tus emociones reprimidas.
Escucha el sonido de la respiración y siente el cuerpo y sus movimientos en cada respiración.
Di en tu mente, acepto, me permito sentir, liberar y relajarme, soy esta meditación.
Imaginemos todos nuestros conceptos, situaciones, relaciones e información estresante y conflictiva, de carencia, frustración, odio, guerra, destrucción, apegos, expectativas; recuerdos oscuros, actos de asesinato, violaciones, masacres y todo lo que se te ocurra, que se manifiesta en la mente.
Veamos cada situación como un globo.
Algunos son rojos, otros naranjas, amarillos, verdes, azules, violetas o dorados.
Todos llevan un hilo y tú los sostienes en tus manos.
Ve juntando uno a uno cada globo en tus manos, hasta que ya no queden conceptos conflictivos, prejuicios, pensamientos de ataque o destructivos en nuestra mente, coloquemos esa toxicidad mental en cada uno de los globos.
Siguen llegando.
Las manos se han llenado, no caben más, no sabes que hacer, como tomar más si las manos están cerradas.
Bien.
Ahora es el momento.
Abre las manos, déjalos ir y libera todos los globos que has recolectado hasta este instante; libéralos, déjalos ir, agradéceles y diles que sean felices, que les vaya muy bien, que vuelvan en forma de energía a Dios.
Observa como flotan felices libres por los aires.
Se han ido.
Ahora vuelve a tomar los nuevos que están llegando hasta llenar tus manos; repite la situación de liberarlos, libera y deja ir hasta que ya no lleguen más globos a tus manos.
Ahora, todo está tranquilo, en calma, no hay nada al parecer.
Espera….
Allí vienen tres globos. El primero en llegar lleva un rostro iluminado, lleno de felicidad, dale una sonrisa, una cálida bienvenida; tu FELICIDAD propia ha vuelto.
Le has recuperado, te sientes alegre, sonríes, con confianza y fe en ti, está al alcance de tu mano, tómala y sostenla, no la dejes ir te pertenece.
Aparece el segundo globo.
Este lleva escrito ME AMO.
Es de tu color favorito, es el color que te gusta; es el color que te hace experimentar dicha y plenitud al observarlo.
Acepta a tu amor propio.
Tómalo en tu mano y ubícalo justo al lado de tu felicidad; pues tu amor propio siempre esta donde se encuentra tu felicidad.
No lo dejes ir, tienes el poder de sostener lo que te pertenece, eres superpoderosa, tu decisión ha sido aceptar tu amor y felicidad propia.
Aún hay más.
Ha llegado un globo llamativo, hermoso, radiante, te genera bienestar, recibe con gratitud tu PAZ interior.
Ubícala junto al amor y la felicidad, juntas te entregan la gracia, la dicha, y la felicidad que siempre has anhelado y ahora por fin la has alcanzado.
Disfruta de ellas, tienes el poder de elección, mantenlas en ti por todo el tiempo que deseas.
Con esto llegamos al verdadero concepto, el único concepto, de ahora en adelante eres TU MISMO.
No hay otros que decidan o aboguen por ti; eres tú en perfecta integridad, solo hay amor y felicidad en ti, y compartes este pensamiento con ocho mil millones de personas que habitan este planeta y con todo el universo.
Sé tú mismo, ante toda situación, recordando, que todos somos iguales y la vida se vive mediante experiencias felices y superación de traumas. Sé feliz de ahora en adelante.
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