Aquí encontrarás nueve concejos para ser una buena suegra y no morir en el intento. Cómo mujeres, siempre queremos lo mejor para nuestra familia. Hacemos un gran esfuerzo para ser buena madre, esposa, hija. ¿Pero damos lo mejor de nosotras?
La imagen de la suegra siempre y aún se sigue viendo cómo esa mujer obsesiva que no suelta o no quiere soltar a sus hijos. Aquí te cuento mis propios concejos para ser una suegra feliz sin morir en el intento y disfrutar de hijos y nietos por toda la vida.
- Acepta que tú hijo/hija ya creció y empezó a construir su propio camino. Esto es un proceso individual y necesita separarse de los concejos y cuidados de una madre.
- Cada persona es distinta, así que no pretendas que la pareja de tu hijo/hija lo trate igual a como lo hiciste tú. Aceptar esto es muy importante para mantener el equilibrio de la relación con el nuevo miembro de la familia. No puedes ni debes tratar de modificar la manera de actuar de tu nuera o yerno. Cada uno es responsable de poner límites en el trato.
- Aconsejar sin imponer. La relación con tu hijo/hija va a cambiar pues no todos los concejos dados serán escuchados; necesitan independencia emocional por eso al dar consejos no esperes que los sigan, solo da tu opinión en señal de apoyo.
- Sus hijos, tus nietos serán educados a su manera no a la tuya, así que debes dejar que tú hijo/hija los críen a su manera; no trates de imponer normas en la educación de tus nietos, así como tú educaste a tu familia con unos principios ellos lo harán con los suyos propios, según lo consideren conveniente y debes adaptarte a esas reglas.
- Tú no manejas sus finanzas. Las finanzas son un aspecto totalmente íntimo, y exclusivo de la pareja. A menos que ellos soliciten tu ayuda u opinión al respecto. Acepta a sus parejas tal y como son. Ellos se eligieron, no pretendas cambiar formas de actuar y personalidad.
- Los problemas de pareja se resuelven entre ellos, no intervengan jamás, un tercero empeora la situación. Mantente al margen, retírate lo más lejos que puedas. Son pareja ya resolverán. Así que mantenerte al margen es una sana decisión.
- Acepta a sus parejas tal y como son. Tus hijo se enamoran de sus parejas tal como son, así que no pretendas cambiar a nadie su manera de actuar.
- Si vives en su casa respeta espacios privados, acepta lo que no puedes cambiar, abre tú corazón, se agradecida de la vida de tus hijos y ellos y tú serán felices juntos.
Vive y deja vivir.
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