Asunto: Renuncio de forma voluntaria
Para: Dios.
Remitente. El ego.
En este acto y de buena voluntad Espíritu Santo, indico que renuncio de forma voluntaria.
Yo el ego, he decidido renunciar total y absolutamente al control del mundo material que fabrique.
Renuncio a la necesidad de dirigir, hacer perfecto y controlar este mundo lleno de ilusiones y fantasías mentales.
Todo es un telón de fondo, simulando un teatro de imágenes aparentes; ocultando tras el telón la verdad de todas las mentes.
Renuncio a las diversas situaciones de necesidad y carencia que he imaginado.
He de renunciar a la necesidad de dinero, de bienes y lujos materiales, de un lugar para habitar, de cuidar y alimentar un cuerpo; del sexo para satisfacer un placer pasajero.
Con total conciencia renuncio a todas las necesidades de relaciones de pareja, buscando una paz y felicidad aparente, produciendo apego emocional.
Renuncio a toda necesidad de fama, fortuna y reconocimiento, a toda necesidad de obtener dinero de fuentes conocidas y desconocidas.
Decido renunciar a la necesidad de encontrarme con otras mentes a través del cuerpo; para obtener un interés oculto que ellos pueden satisfacer y obtener ganancias comerciales con ellos.
Renuncio a toda necesidad y propósito de hacer felices a otros. Renuncio a todos los sueños de vida material, a la necesidad de perseguir un sueño e ídolos; creencias de familia, padres o madres.
Con esto buscaba satisfacer mi arrogancia, vanidad, soberbia, orgullo, ira y odio, al compararme y buscar ser mejor que otros.
Renuncio a toda necesidad y búsqueda de intelectualidad, conocimiento y vida espiritual; en la que me he sumergido en años para buscar todas las respuestas del universo y con esto ser más grande que Dios.
Renuncio a la necesidad de conflictos; guerras, humillaciones, vergüenzas, conspiraciones, ataques y defensas, para tener la razón y argumentar a favor de la demencia.
Preciso indicar que renuncio a toda necesidad de violencia para intimidar a otros.
Renuncio a la necesidad de estar en contra de Dios, aceptando aquí y ahora, en este momento y mediante este instrumento; libre de pactos, la total rendición a la voluntad de Dios y a tu guía Espíritu Santo.
Toda decisión que tome será desde tu guía Espíritu Santo. Siendo en todo instante a favor de la paz y la felicidad que están en mí. Son dones propios de mi vida, respetando y apreciando la vida ajena.
Me hago un lado Espíritu Santo, sé tú quien dirige todas mis decisiones de ahora en adelante; entregando totalmente mi vida a Dios y único creador, dependiendo únicamente de su voluntad y amor para vivir.
Firma atentamente,
EL EGO
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